Por las noches...

Quisiera ser un ángel que ha sido acá olvidado y quedarme a vivir tranquila, velando las cunas de los niños, juguetear con sus ositos, acariciando sus mejillas de luna, cuando la luz se apaga y se encienden las estrellas para iluminar los sueños;

Quisiera ser un conjuro por las noches, que ronda jugando con las manos arrugadas de mi madre, que me regalaron la tibieza de un abrigo, que secaron mis lágrimas y festejaban mi risa. Esas manos y esos labios que me enseñaron a nombrar a Dios como un consuelo cuando los días se volvían de acero.

Quisiera ser un hada que ronda por las noches, burlando las sombras en busca de un destino; colarme por las rendijas de las ventanas y meterme en los sueños para curar los dolores de las mañanas, las angustias de las tardes agobiantes y las soledades de los crepúsculos.


Simplemente, quisiera ser....